Volveré a ser absurdamente cursi.

De hace unos días para acá, antes de escribir el post anterior, empecé a sentirme ajena a este espacio. Así. De repente. Por arte del hartazgo, probablemente. No encontraba ni pies ni cabeza a este blog y no supe hacer más que escribir sobre lo que traía en la cabeza, as always.

Un post después, cuando Marie publicó: Anatomía i, re descubrí el porqué estamos acá, el porqué estoy aquí, quiero decir. Hay magia en sus letras, en su feeling. Anteriormente ya me había encontrado en las paredes de otros blogs, pero cuando llegué con Marie el reconocimiento fue absoluto, y no lo supe en ese momento, creo que, como la mayoría de las mejores cosas en la vida o en la mía, pues, paso desapercibido al principio. Sólo sabía que tenía que estar ahí leyendo otra realidad, las palabras de otra, y parecerá soberbio o egoísta pero es que parecía que me estaba leyendo a mi misma.

Y era, es, como estar en casa. Porque puedo leerle, escuchar cada instrumento en las canciones de los beatles y al mismo tiempo cantar, sin perder conciencia de la naturaleza individual de cada una, como si fuésemos una sola. Es un Orgasmo.

Bueno... luego vendré a escribir algo con sustancia.

1 comentarios:

Idalia dijo...

jejejeje, pues es que cuando se escribe en otro espacio se inventa de nuevo el tiempo. A mí me gusta cómo escribes porque en muchos sentidos no tienes tapujos para decir las cosas, como en este post, y eso se agradece porque no estás escondiendo ningún semblante eres así, tú.

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